Proyección. JEFE Luciano Benjamín Encina
Somos la estética de la violencia expresiva, reza el primer manifiesto del Grupo Escombros, la estética de lo roto (1989). Mientras Luciano lo lee en un break de su trabajo mal pago en una cocina en Italia, se le empieza a figurar una idea en la mente: a veces quiere matar a su jefe. Vuelve a la cocina y, mientras corta verduras con una cuchilla, siente la potencia del utensilio que muy rápido puede convertirse en arma.